Los animales se clasifican según tengan o no un esqueleto interno articulado, en vertebrados e invertebrados.

Bien, el reino Animal (al que todos nosotros pertenecemos) se compone por animales vertebrados y animales invertebrados. De la forma más simple en la que podemos decirlo es que los primeros son aquellos que, como indica su nombre, tienen columna vertebral (compuesta por vértebras). Se estima que unas 62.000 especies se incluyen en esta clasificación y su diversidad es gigantesca. Tienen simetría bilateral y tienen un cráneo que protege su cerebro; asimismo, su cuerpo se divide en cabeza, tronco y cola.
Los invertebrados son los todos aquellos que no poseen vértebras y constituyen el 95% de todas las especies animales. Los vertebrados a menudo son mucho más grandes y cuentan con un cuerpo más complejos que los invertebrados, esto hizo posible que los de la primera clasificación hayan podido colonizar, adaptarse y conquistar prácticamente todo el planeta. Desde los climas y los ecosistemas más inhóspitos a los más simples, más allá de que existen mucho más invertebrados que vertebrados en la naturaleza.